El restaurar un vitral muy antiguo o un vitral con un valor artístico muy importante, requiere un trabajo más experimentado y profesional, ya que el objetivo es  el de devolverle  en lo mayormente posible a la pieza original, su aspecto natural como fue elaborado en aquellas partes o secciones dañadas.

     Para lograr esto se tienen que conseguir en lo posible los vidrios iguales o los más semejantes, en color, en textura o espesor. Si alguna  sección tenía pintura horneada o grisallas, como es el caso de la mayoría de esta clase de vitrales con rostros, figuras humanas, paisajes o detalles, igualmente hay que reponerlas llevando a cabo el arte de pintarlas y hornearlas.

     En muchos casos hay que reforzar la obra completa y reponer las cañuelas de unión dañadas, dado que estos vitrales antiguos fueron hechos con la cañuela tradicio-

nal de plomo con sus inconvenientes con el paso del tiempo. 

     Asimismo su limpieza es más laboriosa y exhaustiva,

ya que poseen por lo general incrustaciones, sarro y óxido que el tiempo a infligido.